Matematicas

 1. Introducción.
    Hacer un problema lo podemos comparar con hacer un viaje. Para hacer un viaje, lo primero que necesitamos es saber a dónde quieres ir. Si no lo sabemos, nunca tomaremos el camino correcto. En un viaje utilizamos el coche, el autobús, el tren, el avión u otros medios.
    Para hacer un problema hemos de saber bien qué es lo que nos piden o qué es lo que hemos de conseguir. Para llegar ahí los medios que utilizamos son sumas, restas, multiplicaciones, divisiones u otras operaciones.
    Para hacer problemas hacen falta dos cosas: primero, saber hacer los cálculos (sumar, restar, multiplicar, dividir y otras operaciones) y segundo, entender lo que nos piden, es decir,  saber a dónde queremos ir. Si no comprendemos lo que hay que conseguir, nunca resolveremos el problema, aunque hagamos muchos cálculos. Se puede decir que comprendemos un problema cuándo sabemos expresar lo que nos piden con otras palabras personales, distintas de las del enunciado.
    En el problema hay tres partes diferentes: a) lo que nos piden, la INCÓGNITA; b) lo que nos dicen, los DATOS del problema; y c) la SOLUCIÓN, que se consigue después de hacer las operaciones correctas.
    Ejemplo: Tengo 7 caramelos (dato) y me dan 3 caramelos por mi cumpleaños (dato). ¿Cuántos tengo ahora? (incógnita). Después de hacer la suma de 7 y 3 sabemos que tengo 10 caramelos (solución).

  2.- Calcular el más y el menos.
    En muchos problemas la primera pregunta que podemos hacernos será: la solución ¿será mayor o menor que los datos que nos dan?
    Ejemplo: Tengo 3 caramelos y mi madre me da 5. ¿Cuántos tengo ahora? La primera pregunta sería: ¿Tendré más o menos caramelos que antes? Evidentemente tendré más, pues 8 es mayor que 3.
    Ejemplo: Tenía 18 folios y he gastado 5 para hacer un trabajo. ¿Cuántos folios tengo ahora? La pregunta personal sería: ¿Tendré más o menos folios que antes?
    Contesta a estas cuestiones, diciendo si tendré al final más o menos.


 3.- Problemas de sumar y restar.
    Sumar es lo mismo que juntar o añadir o reunir en un solo montón dos o más cantidades previas.
    Ejemplo: Antonio tiene 5 euros y yo le doy 2 euros. ¿Cuántos tendrá ahora? (más) La operación que hay que hacer es sumar o juntar las dos cantidades. Tendrá 7 euros.
    Hay que cuidar que las dos cantidades sean de la misma clase. Así que no se pueden sumar euros y caramelos, porque el resultado ¿qué sería? Ni la una cosa ni la otra.
    Restar es quitar o separar una cantidad de otra.
    Ejemplo: José tenía 5 rotuladores y ha perdido 3. ¿Cuántos le quedan? (menos). La operación que se debe hacer es restar y le quedan 2 rotuladores.



No hay comentarios:

Publicar un comentario